La Cascada el Secreto, un lugar donde el agua parece cantar al caer, donde los pájaros no se ven pero se oyen, donde el musgo hace de alfombra aterciopelada
dando el camino de honor a quien logra encontrar este lugar escondido, muy escondido entre el día a día de Villa Restrepo.
Conocí este paraíso natural durante el rodaje de un documental que pretendía proyectar cómo se escuchaba la ciudad, pero que terminó, después de visitar este
lugar escondido, captando y transmitiendo las emociones de los diferentes espacios del corazón musical del Tolima. No era para menos, el secreto era la pieza clave para agradecer, reflexionar y querer compartir cómo lo cotidiano esconde tesoros tan grandes como esta cascada que en un viaje entre lo alto y lo bajo, entre el ruido y el silencio, entre la emoción y la paz, entre lo descifrable y lo indescifrable, es posible hacer realidad lo que para otros es irreal, saber que está ahí, el sentimiento de Exulansis reflejado en el agua de la cascada y su sonido al chocar con las grandes piedras.El camino hasta la cascada no es fácil, como cualquier tesoro, está bien custodiado por escoltas naturales, un sendero empinado y baldío, charcos a medio camino, constantes telarañas colocadas como para vendar los ojos a quien se acerque, piedrecillas resbaladizas, pero con una gratificación visual y una serenata natural esperando dar la bienvenida a los más audaces.
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El documental finalmente tomó el nombre de la sensación de la directora de no poder proyectar exactamente en palabras lo que saltaba en su mente y mi
sensación de descubrir el secreto de la cascada, Exulansis es hoy, el testigo audiovisual de las mágicas aguas que caen incesantemente tras las montañas de
Villa Restrepo.
Publicado por : Karla Valentina
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